La adicción a la metanfetamina es una forma grave de abuso de sustancias que puede causar graves daños físicos y psicológicos. Se caracteriza por un ansia intensa por la droga, uso compulsivo a pesar de las consecuencias dañinas y dependencia física que requiere dosis más frecuentes o mayores de metanfetamina para lograr el mismo nivel de intoxicación. Las personas con adicción a la metanfetamina a menudo experimentan insomnio, paranoia, agresión y cambios de humor extremos. La abstinencia de la metanfetamina puede ser increíblemente difícil e incluso potencialmente mortal sin ayuda profesional.
Un toxicólogo es el especialista en estudiar y analizar los efectos nocivos de las sustancias.
Un psicólogo es un especialista de la salud mental que estudia y entiende el comportamiento de las personas.
El psiquiatra es el médico especialista que diagnostica, trata y previene las enfermedades mentales.