Cuando el cuerpo no puede metabolizar los ácidos grasos para obtener energía, los almacena en las células. El término esteatosis se refiere a este proceso de almacenamiento y al aumento del número de vacuolas de grasa (también llamadas adipocitos) que se forman en una célula. Estas vacuolas o gotitas se acumulan en el citoplasma de las células hepáticas.
Un hepatólogo es un médico especializado en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del hígado. Este especialista aborda condiciones como la hepatitis, la cirrosis, la enfermedad del hígado graso, las infecciones hepáticas, los trastornos metabólicos del hígado y el cáncer de hígado. Los hepatólogos utilizan diversas técnicas diagnósticas, incluyendo análisis de sangre, ecografías, tomografías computarizadas (TC), resonancias magnéticas (RM) y biopsias hepáticas para evaluar la salud del hígado y determinar el mejor curso de tratamiento. Es recomendable acudir a un hepatólogo si se presentan síntomas como ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), dolor abdominal, hinchazón en el abdomen, fatiga extrema, pérdida de apetito o peso inexplicada, o si se tiene una enfermedad hepática diagnosticada que requiere un manejo especializado.